Recepción, almacenamiento y distribución de mercancías en el almacén.
Recepción de mercancías: Recibir y verificar las mercancías que llegan al almacén, comprobando su estado y cantidad.
Almacenamiento: Colocar las mercancías en las estanterías o ubicaciones correspondientes, siguiendo las normas de organización y clasificación del almacén.
Preparación de pedidos: Recoger y preparar los productos que deben ser enviados a clientes o a compañeros para su posterior montaje.
Control de inventario: Realizar inventarios periódicos para verificar las existencias y asegurarse de que no haya discrepancias.
Mantenimiento del orden: Mantener el almacén limpio y ordenado, cumpliendo con las normas de seguridad y prevención de riesgos laborales.
Puede operar maquinaria, como carretillas elevadoras, y utilizar sistemas informáticos para gestionar el stock y los pedidos. Este trabajo requiere habilidades organizativas, atención al detalle y la capacidad de trabajar en equipo.
Se requiere conocimientos de electricidad.